domingo, 3 de enero de 2010

Día #05 – 02/09/2009: Xi’an. Guerreros de Terracota, Barrio Musulmán, Gran Pagoda del Ganso Salvaje


Nos levantamos a las 7:00. Hoy nos cuesta salir de la cama ya que ayer fuimos a dormir más tarde de la 1:00 PM, pero nos levantamos contentos y con ánimos. Desayunamos en el hotel (48Y) y cogemos un taxi hasta la estación norte de tren (10Y). Al llegar encontramos a cientos de personas delante de la estación, unos que esperan, otros que van… y entre todo el gentío intentamos buscar el bus 306 que llevamos en nuestras notas, para llegar a los guerreros de terracota. Antes de encontrarlo, una mujer llama nuestra atención señalando un autobús que nos indica va a los Guerreros. Antes de subir, preguntamos el precio y al ver que es el mismo que el bus 306 lo cogemos (7Y/persona). Tardamos algo más de una hora, y a diferencia del 306 los guerreros no son la última parada, por lo que nos avisan para que nos bajemos a la entrada del complejo, mientras el autobús prosigue su viaje. Como curiosidad, comentar que somos los únicos turistas que viajan en el autobús, así que solamente nosotros hacemos esta parada.

 A la entrada de los Guerreros de Terracota intentan vendernos un guía para la visita (100Y). En todos los casos les decimos que queremos hacerlo por nuestra cuenta, aunque las guías siguen insistiendo en que el complejo es grande y necesitaremos a alguien. Nosotros declinamos la oferta y compramos nuestras entradas con descuento de estudiante (45Y/persona, 50% descuento). Es necesario presentar un carnet con fotografía para que apliquen el descuento.Este mausoleo, patrimonio de la humanidad por la UNESCO desde 1987, corresponde a la tumba del Primer Emperador Qin entre los años 221 y 207 a.C. Poco tiempo, pero suficiente para imprimir una huella que llega a nuestros días: él unificó pesos y medidas, la moneda, la escritura china y creó el estado centralizado bajo el control de una burocracia de funcionarios. Además de su megalómana tumba dejó otro gran legado, la Gran Muralla.

Compramos una audio guía (45Y) aunque las explicaciones son las mismas escritas en los paneles informativos. Dado que ya eran las 11:00 decidimos coger un cochecito que nos lleva a la entrada del recinto (5Y/persona), pero después de ver el recorrido, el cual no es demasiado largo, no vale la pena cogerlo. Nosotros realizamos el recorrido del derecho, entrando por el Pit1, después Pit2 y finalmente Pit3. El primero es el más impresionante de los tres, ya que es donde se observa un mayor número de guerreros desenterrados y algún caballo. En el resto de los agujeros, sobre todo en el 3, un ejército de carros y arqueros están por desenterrar, ya que no existe una tecnología lo suficientemente avanzada como para no dañar los restos al desenterrarlos. Así que los mantienen enterrados, que es una de las mejores formas de conservarlos.

Salimos sobre las 14:00 y al llegar a la salida, un autobús a lo lejos nos avisa que va dirección Xi’an (de nuevo, no es el 306) y decidimos subirnos (7Y/persona). Durante el trayecto, el conductor se equivocó de salida de la autopista, y quería volver a ella por la mediana, con tan mala suerte que el autobús se quedó barrado entre una carretera y otra. Nos hacen bajar del autobús y algunos hombres ayudan al conductor a poner piedras para poder sacar el autobús. Finalmente, logran que el autobús vuelva a la carretera original y proseguimos nuestro viaje a la ciudad, no sin antes, hacer un cambio de sentido atravesando más de 6 carriles en una autopista. Finalmente llegamos de nuevo a la estación norte de tren, donde nos deja el bus. Los alrededores siguen atestados de gente. Observamos a mucha gente joven que tiene pinta de venir a estudiar a la ciudad, y algunos chinos venden mapas de la ciudad a quien lo necesite. Andamos por la calle Jiefang dirección sur en busca de un taxi, pero no lo encontramos. Son casi las 16:00 y todavía no hemos comido nada. Compramos una botella grande de agua (4Y) y dos pitas fritas, una de huevo y otra vegetal, en un establecimiento de comida callejera musulmán. (2Y/pita).

Encontramos una parada de autobuses y tras ver qué autobús nos va bien, cogemos el 603. Le preguntamos al conductor cuánto cuesta, pero nos indica que entremos en el bus. Pensando que habría alguien en el interior para cobrarnos, entramos pero no encontramos a nadie. Creemos que el conductor, al no entendernos, ha preferido que no pagáramos a que estuviéramos tanto rato para entendernos. Bajamos al lado de la Bell Tower y desde allí andamos hasta la Drum Tower. Entramos en el barrio musulmán y rápidamente nos sorprende esta zona de la ciudad, por las calles estrechas, su colorido y actividad comercial. Paseamos por Xiyang Shai y giramos por Beiguangjy jie y también por Dapi Yuan. Vemos muchos puestos callejeros donde compramos frutas confitadas de todo tipo (10Y), una pasta de palosanto (1Y) y otra pita frita con especias varias, pero sin nada dentro (3Y). Todo buenísimo. Sobre las 18:30 decidimos ir andando al hotel a descansar, donde nos conectamos a Internet (5Y) para escribir a la familia, ver la predicción meteorológica del día siguiente y darnos una ducha.

Sabemos que a las 9:15 hay un espectáculo de agua en la Gran Pagoda del Ganso Salvaje, así que sobre las 20:00 salimos del hotel. Queremos coger el bus 609 que es el que nos lleva hacia allí, pero no lo encontramos en la dirección correcta y finalmente decidimos coger un Taxi hasta allí. (12Y). Sobre las 21:00 empieza el espectáculo. Hay mucha gente, sobre todo chinos, que han venido a disfrutar del espectáculo de luz y agua. Encontramos un buen lugar para ver el espectáculo entre dos de los pisos de fuentes. El espectáculo dura una media hora aproximadamente y nos parece muy recomendable para quien haga parada en Xi’an. Después del espectáculo paseamos alrededor de la gran pagoda, que está iluminada, llegando hasta el Tang Paradise donde hay un grupo de chinos bailando. De vuelta, encontramos un segundo grupo de chinos agrupados cantando canciones tradicionales chinas. Estamos con ellos un rato teniendo de fondo la pagoda iluminada. Regresamos a la entrada del parque y cogemos un taxi hasta la Drum Tower (15Y), que a esta hora ya está iluminada. Entramos de nuevo al barrio musulmán con la idea de cenar algo y compramos un plato grande de lo que creemos era sepia con soja y especias varias (aunque no estamos seguros, 3Y) y un pan grande (5Y). Al salir del barrio compramos un agua y un helado de postre en el McDonalds (10Y). Seguimos paseando por la Bell Tower, también iluminada, hasta llegar al hotel. Estas dos torres son visitables, (30Y por separado, o si se compra la entrada para las dos 50Y). Nosotros no las visitamos y otros viajeros en ruta que conocimos nos comentaron que eran más interesantes por fuera.

Para ver todas las fotografías de este día sigue este enlace o, este otro para verlas como presentación.

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